Hace
poco decidí abrir mi corazón. Confiar. Suena cholulísimo, lo sé,
but stick with me!
Una
amiga me dio un consejo, yo estaba en mi ya habitual nube de
incertidumbre. Ella dijo algo sensato, simple, pero extraña y
sencillamente iluminador, de esas cosas que llegan en el momento
justo, esos consejos que prácticamente estabas dándote a ti misma,
pero hasta que otro no lo verbaliza en el momento exacto en que estás
abierta a escucharlo (y escucharte), no te “entra”. Me dijo que
tomara UNA de esas tantas opciones que me tenían abrumada, y en duda
constante, (hablo de decisiones que abarcaban diversos ámbitos de mi
vida) y que mutara con ella, que me colgara, que la abriera y
descubriera hasta donde podía llegar. En un principio noté el
carácter obvio de la afirmación, pero la rechacé levemente, ya que
implicaba JUGÁRMELA por algo, con los riesgos que eso conlleva, y
las pérdidas que implica. JEJEJE
Pero
a medida que pasaron los días y semanas, me permití considerar la
opción, dejarla abierta a debate. Y fui, casi inadvertidamente,
tomando ciertas actitudes y decisiones que me fueron dirigiendo en un
camino de ida hacia el país de las infinitas posibilidades. Jaja,
joda, le di color, pero sí el de los buenos resultados. :)
Y
como siempre, me cuestioné ciertas actitudes que venía viendo en mi
(y amigos, ya que parece ser un mal generalizado, jeje), en donde me
encontraba hermética a conocer en profundidad a alguna de las tantas
posibilidades, y transformarla en algo mas, por miedo y otras yerbas.
También notaba, particularmente en un amigo, un intento de
encasillar toda situación en una etiqueta, que implicaba vaticinar
de antemano qué iba a suceder con determinado suceso. “Uh, cada
vez que sucede algo como esto (bueno), siempre queda por esa, no
evoluciona, o me alejo yo o se alejan”. Supe que dejar de darle esa
linealidad a los hechos, de siempre asumir que A causará B, tenía
que ser el paso N° 1. De lo contrario, eso llevaría paulatina y
peligrosamente a la incapacidad de amar. Sí, ahora estoy hablando
puntualmente del amor.
Y
finalmente pude decir algo con propiedad, y no sólo comprendiendo
que eso era así, sino sintiéndome capaz de ponerlo en práctica:
cuando así se siente, puede ser positivo probar en confiar en
alguien, que ese alguien confíe en una, ceder frente a otro
inclusive cuando no se comparte TODO, ya que después de todo, así
es la vida real. Decidí agarrar una de todas las pelotas en el
aire, y empezar a mutar con esa, descubrir hasta donde podía llegar,
también para probarme a mi misma que era/soy capaz de abrirme y
entregarme a otro, asumiendo las ventajas y los riesgos que eso supone.
Conectar
más allá de lo que haya pasado ayer, o pueda pasar mañana, sino
compartiendo en el HOY. Y este último principio se aplica a varias
situaciones de esas que nos generan ansiedad (pareja, exámenes,
trabajo, proyectos, etc). Y no pretendo banalizar la importancia de
una cierta consideración al tiempo que está por venir, no hablo de
actuar desinteresada, impulsiva e imprudentemente hoy, sin pensar en
las consecuencias. Eso dicho, sí considero que por más tangibles
que sean los miedos o proyecciones a futuro -un examen muy
importante, un viaje inminente que te “impediría” desarrollar
una relación con alguien, decisiones de vida que implicarían
cambios donde mucho está en juego, etc.- todo ello está,
irremediablemente, en un mañana que, después de todo, AÚN NO
EXISTE. Realmente, dejarnos sobrepasar por la ansiedad que nos genera
una posible consecuencia o desenlace de eventos que aún no
sucedieron es un gasto de tiempo y salud mental. Más aún, el dejar
de experimentar vivencias que nos llenarían en el HOY, por miedo a
qué pueda ser de ellas en el MAÑANA es ilógico.
Por
ende, mi conclusión por ahora (sujeta a modificaciones, jeje) es: a
jugársela, confiar, fluir con las situaciones, y tomar una postura
pro activa frente a nuestras vidas; creer en el poder que sí tenemos
de moldearlas a nuestro parecer. Cómo compartió una amiga hace
poco: “No debes preocuparte por la intensidad del esfuerzo que
realizas, sino en la persistencia del mismo”. Vamo' arriba, que
siempre quedan muchas chances aún de salirse un pasito más fuera de
nuestra zona de confort.
Peace,
love, n' out.
A.-
Cierro
con esta cita traducida, incluída su fuente al final:
C.
S. Lewis en "The Four Loves"
"No
hay inversión segura. Amar en absoluto es ser vulnerable. Ama
cualquier cosa, y tu corazón sin duda se exprimirá y posiblemente
se romperá. Si desea asegurarse de mantenerlo intacto, usted debe
dar su corazón a nadie, ni siquiera a un animal. Envuélvalo
con cuidado, rodeado con pasatiempos y pequeños lujos, evite todos
los enredos; enciérrelo con seguridad en el cofre o ataúd de su
egoísmo. Pero en ese ataúd - seguro, oscuro, inmóvil, sin aire –
éste cambiará. No va a ser roto, pero
se convertirá en irrompible, impenetrable, irredimible. La
alternativa a la tragedia, o al menos al riesgo de tragedia, es la
condenación. El único lugar fuera del cielo donde se puede estar
perfectamente a salvo de todos los peligros y perturbaciones del amor
es el infierno."
Fuente: "¿Qué es el amor?
Definiciones famosas en 200 años de la historia de la
Literatura"http://www.brainpickings.org/index.php/2013/01/01/what-is-love/